El mejor

Es verdad que cada lugar tiene su encanto, cada sitio sus particularidades y sus características únicas. Lo mejor de viajar es sumergirse en esos atributos irrepetibles de cada cultura, que carga con su historia, lugares y su gente. Gente inmensamente buena.


Bla, bla, bla... A esto todos lo saben. Los que amamos viajar lo sabemos muy bien.


Viajando cada uno elige sus lugares, sus aventuras. Casi siempre, las que más cuestan son las que más valen. Aquellas que representan grandes objetivos, las que parecen más lejanas y difíciles de alcanzar.


En el caso de esta humilde "persona que ama viajar", con solo 24 años y algunos viajes (pero ni un 2% de todo lo que quisiera), he llegado a la conclusión, al menos en este momento de mi vida, de que ya tengo elegido mi "mejor lugar del mundo". Ese que te trae los mejores recuerdos, en el que tuviste las mejores emociones y el momento de mayor gloria personal. Por qué no, aquel en que un par de lágrimas rodaron.


Ya sé que al lugar también lo hace la gente con el que lo compartimos, y eso le pone el elemento esencial, el de la compañía. Pero sin dudas este es mi lugar, más allá de todo, y en todo sentido. 


Hay millones de lugares absolutamente increíbles en todo el planeta, pero este es para mi...

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Sin dudas el mejor lugar del mundo

Eso es desde la Puerta del Sol (Intipunku). Final del Camino del Inca.


¿No se ve bien?

Desde el otro lado (Cerro Wayna Picchu)

¿Está lejos?

Desde la Casa del Guardián

¿Más cerca todavía?

La zona agrícola y las terrazas de cultivo

El centro de la Ciudadela

Los pasillos

Ni el arcoiris se lo quiere perder

Unas fotos no muestran nada, o lo que muestran es un insulto en comparación a lo que verdaderamente es. Como sea, este es un pobre homenaje al lugar que me hizo perder la cabeza durante tantos años. Perder la cabeza pero decidirme a vivir viajando indefinidamente hasta que pueda, hasta el último día que me sea físicamente posible. Me quitó el sueño meses seguidos, pero me dio el premio más grande, y compartido con amigos.


Hasta siendo físicamente distante, sé que una parte de mí vive ahí todos los días, y seguramente el alma de todo amante de viajar tiene un pedazo suyo en esa majestuosidad. No hay nada que se le compare, nada que guarde mejor los secretos del que anhela profundamente llegar a ese lugar y llorar un poco. Solo un poco, como cuando tuve 20 años y lo vi. Te vi ahí. Me vi ahí.


Este es un pobre homenaje a la Ciudad Perdida de los Incas, el gran Imperio Inca, Maravilla del Cusco y del Perú, Maravilla de Latinoamérica y la historia originaria continental; Maravilla del Mundo y la humanidad.


Una amiga, en cierto momento hace un tiempo, me dijo unas palabras que desde entonces siempre tengo en cuenta:


"Solamente se logra dimensionar la inmensidad de esta Ciuidadela perdida cuando la descubrís.
Cuando te cansa mucho llegar
Cuando crees que lo que estás viendo es mentira
Cuando te das cuenta que querés ir y que eso implica grandes sacrificios físicos
Cuando caminás /valga la redundancia/ el Camino del Inca durante muchos días y, en el mismo, pensás que lo que estás haciendo es estúpido
Cuando llegás a la puerta del Sol y te quedás callado."


Y es así, creés que lo que estás viendo no es verdad. Uno piensa que no puede haber algo más majestuoso, maravilloso e indescriptible en la superficie de este planeta. Uno en ese momento no piensa, porque no puede pensar. Está prohibido y solo hay que sentirlo. ¿Cómo es posible que todavía lo tenga en la retina, que cierre los ojos y lo vea? Un escalofrío me recorre cuando me acuerdo y los brazos se me ponen "piel de ave".


No importa dónde viaje en el resto de mi vida (por más que lo voy a seguir haciendo y lo voy a seguir disfrutando); conoceré pueblos, ciudades, países y lugares de cualquier tipo. No importa: Machu Picchu es y será, para mí, sin dudas el mejor lugar del mundo.


A todo aquel que lea esto o se haya sentido identificado yo le pregunto (y con gusto espero las respuestas): ¿Cuál es tu mejor lugar del mundo?