martes, 18 de agosto de 2009

04/02 – Otro día humahuaqueño


Dormimos fantástico y a las 10 y media nos fuimos de la casa. Queríamos buscar otra cosa más tranqui donde tuviéramos más libertad y un ambiente más nuestro. Lo encontramos: una casita llena de viajantes hombres y mujeres, cocinando todo nosotros, durmiendo en el piso. Excelente.


Al mediodía nos cocinamos unos fideos monumentales y a la siesta la usamos para hacer nada un rato. Luego salimos a caminar a la plaza y subimos al monumento característico que está en la parte alta de este pueblo. Ahí nos colgamos un rato largo a base de mates y recuerdos de todos estos días.


Más a la tarde, con unos porteños de la casita donde estábamos, nos tomamos unos Fernets y a la nochecita, después de cenar arroz, que a esa altura ya circulaba por nuestras venas, salimos a conocer una peña con música en vivo, en un lugar que se llama Ahicito. Buena música, buen folclore, pero el ambiente medio apagado porque había poca gente (era día de semana, seguramente los jueves, viernes y sábado se pone).


Así fue nuestra última noche en Humahuaca y en la Quebrada. A la mañana nos despertamos y sacamos pasajes a San Salvador de Jujuy al mediodía. Me voy a encontrar con el grande de Nachito Jorge para coronar este viaje de una forma inmejorable. Ahí me separaré de los camaradas aventureros. Yo iré directo a Córdoba a ponerme a hacer la tesina y ellos van a ir más despacio viendo si llegan a Santa Fe.


Esto está llegando a su final. Parece imposible que hayamos hecho lo que hicimos. Nada más las fotos nos intentarán convencer de que esto realmente existió. Estamos alucinando cada vez más, y esto no tendrá fin en todo lo que reste de nuestras vidas.

1 comentario: